domingo, 27 de noviembre de 2011

Hay ropa amontonada por toda la casa, no sé donde sentarme - Abuela ¿piensas montar un mercadillo solidario para alguna de las asociaciones que se van a quedar sin subvención? - "Ya estás diciendo tonterías de buena mañana... A ver ¿qué pasa?" - Hago un gesto que abarca todos los montones - "¡Ah!, eso... Es la ropa que voy a llevarme al viaje" - Me dijiste que te ibas unos días ... - "Así es, lo que pasa es que como no se si va a hacer frío o calor, lo mejor es llevarme un poco de todo en la maleta" - ¿Una maleta? jejejejeje... Quiero ver cómo metes todo esto - La abuela queda pensativa. - "Ahora que lo dices, me parece que no habrá sitio para la garrafa de agua de Pascualita" - Por eso no te preocupes, la sirena se queda aquí ¿o quieres que le de un síncope entre la presión del vuelo y las apreturas del termo? - "¡¿Y mi asma?!" - Déjate de cuentos, además, si te pasa algo, en la habitación contígua tendrás un médico a mano - "¿Ah, sí?. ¿Cómo sabes tú quién estará en esa habitación?" - Es fácil. Tú amigo And... ¿Quiéres decir que vas a compartir el cuarto con él? - "¡Claro! Así nos sale más barato el viaje" - ¡Lo tuyo no tiene nombre! Espero que, por lo menos, tomeis precauciones. - " ... Bueno, me llevo un paraguas y un chubasquero por si llueve pero..." - ¡No te hagas la loca que ya sabes de qué hablo! - "Pues, ahora mismo no caig ... ¡Ah! jajajajajaja ¡Que tonta eres! ¡Tienes el cerebro más viejo que el mío! jajajajaja... ¡Ay!, no te preocupes, hija, que por allí habrá farmacias y compraré la píldora del día después si la necesito jajajaja... Cuando se lo cuente a mi amigo no se lo va a creer jajajaja..."
Finalmente, parece que ha desistido de llevarse a Pascualita y para contentarla no para de hablarle las cosas que hará y verá en Cantábria y le ha prometido que, al volver, le enseñará las fotos y comentará con ella todo lo que haya hecho - ¿Todo, abuela? - Le ha guiñado un ojo a su amiga - "¡Todo. Con pelos y señales!"
La abuela tiene razón en una cosa, aunque no se la reconozca: soy una agonías, una pusilámine. Estaba deseando que no se llevara a Pascualita por lo que pudiera pasarle y ahora que la he convencido se me ha metido el miedo en el cuerpo por si la policía entra en casa cuando yo no esté y la descubra, porque estará sola la mayor parte del día mientras estoy trabajando. Estando la abuela en casa tiene tiempo de esconderla y si estamos las dos, mejor que mejor, pero Pascualita sola no tiene ninguna posibillidad de escapar aunque sí de atacar, cosa que no sería aconsejable... No sé qué hacer y no quiero comentarlo con la abuela porque acabará llevándosela... Creo que no me queda otra que colgármela del cuello, vaya donde vaya. ¡Menudo plan! - Abuela ¿Tú amigo te ha comentado algo más sobre lo de Pascualita? -"Ah, sí. Ya no me acordaba. Dice que la policía ya se ha puesto manos a la obra y no cree que tarden mucho en dar con el bicho ese" - ¿No crees que sea una noticia importante? - "Claro que sí. Estoy muy preocupada. Venga, ayúdame a hacer la maleta" - ¿¡Preocupada!? No veo tu preocupación por ningún sitio - "Mira, hija,  mi preocupación es por tí, que pareces un alma en pena. Estos días que estarás sola búscate un buen guayabo y pega el polvo de tu vida. No le des tantas vueltas a la cabeza que Pascualita sabe defenderse sola" - (Está decidido. Me llevaré a la sirena donde yo vaya, lo que no tengo tan claro es que ella quiera venir conmigo)

No hay comentarios:

Publicar un comentario