martes, 1 de mayo de 2012

- "¡Heil, Hitler. Heil, Hitler...!" - No ha sido un agradable despertar oyendo esta cantinela, prefiero el trino de los gorriones y el chillido de los vencejos, pero esto es lo que sonaba por el pasillo de casa de buena mañana. Al asomarme he visto a la abuela y a la Cotilla marcando el paso de la oca, con más o menos fortuna (más bien menos). - ¿Llamo al Manicomio? - "Ponte detrás de nosotras y marca el paso. Tenemos que ir con los tiempos y éstos dicen que quién manda es la Fürer Merkel. Ni Rajoys, ni Bauzás, ni  Perico de los Palotes" - La abuela llevaba prendido el broche con Pascualita incorporada, en su bata.

- ¿A qué viene esto? ¿y qué hace ésta aquí tan temprano? - He venido a darle noticias frescas y de paso, a desayunar. El Gobern de Boquita de Pinón va a cerrar dos hospitales: Caubet y La Sang.- ¿Ya le habéis dado al chinchón de buena mañana? - La abuela, muy marcial ella, ha contestado sin perder el paso - La Fürer alemana ha abierto la boca para pedir más y se lo hemos dado. El día que nos pida que nos pongamos todos mirando para Pamplona también lo haremos y se montara una orgía nacional" - Pero, no puede ser. ¿Qué han dicho la oposición y los sindicatos? - "¿Qué van a decir? ¡Quién esté libre de pecado, que tire la primera piedra!... Por lo visto nadie está libre. Así que nosotras, a lo nuestro" - Y si tenemos que creernos que estamos en un País cada día más pobre,(dijo la Cotilla) nos lo creeremos aunque los de siempre sigan ganando un absurdo; los bancos paguen millonadas a sus directivos cuando se jubilan,  los ex Presidentes cobren burradas de por vida, etc. etc. Nosotros a decir amén aunque, eso sí, cada día un poco más cabreados. Venga, que no decaiga ¡Heil, Hitler...! - ¡Vaya dos! Se lo han tomado a pecho... La radio me ha confirmado la noticia y me ha amargado el día. Para remate, el alcalde de Campos saca los pies del tiesto y dice que las multas del domingo se pagarán ¡Toma!...

Nos están borrando del mapa. Perdemos nuestras señas de identidad ayudados por los que tendrían que defendernos y pienso que un día no muy lejano, alguien encontrará en un escondido rincón de un museo foráneo, un especímen disecado. Mirará el letrerito a sus pies "Balear. Especie extinguida. Esta tribu pasó, en poco tiempo, de la nada al todo. Poderosos como pocos, no supieron digerir tanta riqueza. Quemaron sus naves (el paisaje) borraron su identidad (la lengua y las costumbres) olvidaron a sus dioses y adoraron al Becerro de Oro. Su declive fue rápido, propiciado en parte por las tribus del Norte que acabaron con ellos adueñándose del territorio (previo pago). Hace muchos años que el último indivíduo de la tribu desapareció.   



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