sábado, 28 de julio de 2012

- "Me he pasado la noche soñando con 007" - ¿Te apetecían patatillas a esas horas? - "Patatillas no pero a James Bond le hubiese hecho un buen favor jijijijiji... ¡Ay! que guapo salió ayer. No me extraña que la reina Isabel, cuando él le dijo Ven, lo dejara todo y se fuera y hasta se tirara en paracaídas... ¡Que hombre, por Dios" - ¿Qué te ha hecho Andresito? - preguntó la Cotilla apareciendo ante nosotras como por arte de magia - "El nada... y eso es lo malo. Hablábamos de las Olimpiadas... - Yo no las vi - Como se pasó con el chinchón estuvo durmiendo durante toda la ceremonia ¿No sabe dormir sin roncar? No podíamos oír nada.

- "A mi me gustó todo, la música, el humor, la fantasía y el ingenio enseñando los logros ingleses y... Paul. Solo una cosa me entristeció: lo orgullosos que están los ingleses de su Sanidad y nosotros de presumíamos de tener la mejor del mundo ¡estamos dejando que la desmantele la pandilla de ineptos que nos gobiernan! ¡Eso se creen ellos! Lo mismo podríamos poner de Presidente un espantapájaros porque los que mandan no están en España"

La abuela ha tomado carrerilla y no hay quién la pare - ¡Y la "Señora" Lagarde, del Frente Monetario Internacional, dice que en España hay demasiados jubilados! ¿Que ha querido decir con esto? ¿Van a poner en marcha una Operación Final contra nosotros?" - Abuela, no desbarres... Tranquilizate y piensa en James Bond... ¿Te imaginas si se presentara en casa? - "¡Ojalá!" - ¿Lo invitarías a comer? - "De mil amores" - ¿Y qué le darías? - "Hummmm... no sé... tal vez... un arroz brut - ¿Con éste calor? - "Una pierna de cordero rustida, con sus patatitas y verduras y salsa para que se chupara los dedos" - Pues hazlo y a lo mejor funciona jajajajaja - Sí, hazlo y aunque no funcione nos lo comeremos todo - "Creéis que me ha tocado la lotería?"

La conversación la interrumpió el timbre de la puerta. La Cotilla, presurosa, fue a abrir - Para que luego digáis que lo único que hago es comer.- Al volver traía una carta en la mano temblorosa - No te lo vas a creer... Lee - El sobre, a nombre de la abuela, lo remitía ¡Bond, James Bond!. A la pobre le dio un patatús que a punto estuvo de costarle un disgusto. Tuve que darle Agua del Carmen mientras la Cotilla la abanicaba con un periódico - ¡Abuela, vuelve en tí que aún no has echo la comida!

Mas tarde se aclaró todo. Era propaganda de un bar de tapas que van a abrir en el barrio al que le han puesto este nombre difícil de olvidar.

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