jueves, 3 de abril de 2014

He ido con la abuela a ver a la Cotilla. Está mucho mejor. Sin tubos ni sueros. Los médicos no se explican cómo ha podido recuperarse tan pronto, de un día para otro. - Si fuese creyente diría que es un milagro pero como no lo soy, pienso que aquí hay gato encerrado - Nos dijo el médico que la atendía. - Naturalmente no abrimos la boca.

Cuando se fue, la Cotilla comentó que tenía sueños extraños. - ¿Pesadillas con el sacristán? - (pregunté) - ¡No! Pero cuando salga de aquí, las va a tener... Es un sueño en el que estoy pero no estoy... No sé si me explico. - ¡Pues no! - Veo a través de unas personas estrambóticas... O sea, que las veo a ellas pero el sueño es mío ¿Lo entendéis ahora? - ¡NO!

El médico entró de sopetón. Nos miró, receloso y salió sin decir esta boca es mía. - ¿Nos espía? - ¡Claro! fuisteis las únicas y últimas personas que estuvieron aquí ayer. - "A ver ¿qué sale en el sueño? - En MI sueño... aunque no me vea... - Porque ve menos que un gato de plomo - ¡Calla, ya, coñe, que me desconcentras! Estamos en el principio del mundo... - ¡Ya decía yo que era más vieja que la tos! - y un gran dinosaurio camina solo por los montes, feliz ... - ¡Hasta que usted se lo comió y se extinguieron! - ¡Qué cruz tienes con esta nieta! En primer plano hay tres seres extraños venidos de distintos planetas - "¿Por qué?" - Por las vestimentas. Ningun@ va igual. La larga melena rubia del primer@ denota que viene de Gamínedes. La pinta del pequeñ@ me tiene obsesionada porque no logro ubicarlo... ¿quizás de Saturno? y el últim@ ha confundido la velocidad con el tocino porque va vestid@ para un funeral de Estado en pleno campo jurásico... - "¿No me digas que también sale Rouco?" - ¿Es el dinosaurio? - ¡Ahora que lo dices...! - "Entonces bien comido está, Cotilla"

Se abrió la puerta de golpe y entró el médico. Miró y se fue. - "Que neura tiene este hombre" - Cuando la puerta volvió a abrirse fue el sacristán el que entró en la habitación de la Cotilla - ¡¿Cómo tienes la cara de presentarte aquí, limpia-cepillos?! - La vecina estaba fuera de sí - "¿Este es el que te quita el trabajo?" preguntó la abuela con voz pausada de señora bien - Me han mandado... que venga a... disculparme... - ¿Quién? quiso saber la Cotilla? - Los de Arriba (dijo el hombre con los ojos bajos. Se notaba que no estaba a gusto allí) - ¿Los vecinos? pregunté yo y recibí un empujón de la abuela. - "Cotilla, creo que debes perdonarle..." - la mujer negaba una y otra vez con la cabeza y la abuela perdió la paciencia - "¡He dicho que pelillos a la mar, jopé!... (sacó la botella de chinchón de su gran bolso y llenó dos vasos de plástico) Venga, brindad porque todo salga bien" - Ambos estaban bebiendo cuando entró de nuevo el médico. - ¡¡¡¿Qué hace?!!! (le gritó a la vecina) - Y como si nos hubiéramos puesto de acuerdo, la abuela y yo señalamos al sacristán y a la botella de chinchón. - ¡¡¡Ha sido él!!! - Lo echaron con cajas destempladas sin darle tiempo a hablar. Entonces, a solas las tres, brindamos porque todo HABÍA SALIDO BIEN... Que jodía la abuela jejejejeje.

No hay comentarios:

Publicar un comentario