martes, 4 de octubre de 2016

La mujer elefante.

La Cotilla se ha convertido en el Monstruo del barrio. Cuando los niños la ven le tiran piedras. Las madres amedrentan a sus hijos, si se portan mal, diciéndoles ¡Que viene la Cotilla! Y hay gente que la ha contratado para que dé miedo la Noche de Todos los Santos. ¡Encima hace negocio a mi costa!

Hay quién la llama La mujer Elefante porque el tema de las orejas es espectacular. Cuando se pone aretes semejan dos argollas donde sujetar la falda. - ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaa! ¿Dónde está el ánima de tu primer y repuñetero, abuelo? - Perdido entre los recovecos de la Eternidad. - ¡Déjate de tonterías! Necesito hablar con él porque quiero mantener éste aspecto hasta que pasen las fiestas de Difuntos. Me estoy poniendo de moda y me llueven los contratos, por eso no quiero "desinflarme" a los pocos días. - Pues, perdone que se lo diga, pero está usted más fea que Carracuca. - La envidia te corroe, boba de Coria. - ¿A miiiiiiiiiiiiiiiii? ¿Se ha mirado en el espejo? No lo haga que puede darle un soponcio grave.

La abuela vino cargada de botellas de chinchón. - "¡Ayudádme, pardalas, que ésto pesa!" - Cuando la vecina se dio la vuelta, la abuela dio un respingo y cuatro botellas se estrellaron contra el suelo. - "¡Maldita sea, Cotilla! Avisa que vas a girarte." - Esta vez tu primer marido se ha portado bien conmigo. Voy a ganar un buen dinerito a final de mes. Ahora me arrepiento de las muchas  perrerías que le hicimos en vida. - "¡A lo hecho, pecho!" - Pobrecillo. - "Por tu boca habla el interés. No me creo que te sepa mal lo que le hicimos. Si en lugar de las orejas y la nariz, te hubiera desgraciado un ojo, por ejemplo, no dirías lo mismo." - ¡Que gran idea! Necesito que se ensañe con mis ojos ¡Estaré horrorosa y podré subir el caché. Díselo tú, nena, que te hará más caso.

Esta mujer está pallá. Creo que los años empiezan a pasarle factura. Los que cumpla ya serán 98 si no voy herrada porque, éstas brujas nunca contestan lo mismo cuando les pregunto los años que tienen. Calculo que son de la quinta de Matusalen.

Llamaron a la puerta y al abrir quedé patidifusa. ¡El mismísimo Brat Pitt me sonreía desde el rellano de la escalera! ¡Y recién divorciado! - ¡¡¡Abuelaaaaaaaaaaaaaa!!! (grité) ¡¡¡Ya tengo padre para tu biznieto!!! - Dicho ésto, cai redonda al suelo. No resistí una emoción tan grande.

Al abrir los ojos estaba tumbada en mi cama. Era un buen comienzo. Del comedor salían unas voces alteradas. - ¡Que sí. Que me lo ha dicho! - "¡No digas tonterías!" - Lo siento por vosotras pero, esta vez, gano yo... - ¿Qué es lo que gana, Cotilla? (pregunté, mosqueada) - A Brat Pitt. - ¡No diga tontunas! - ¡Me ha contratado para darle un susto de muerte a Angelina! Luego se echarán unas risas y ella retirará la demanda de divorcio. - "¡¡¡JA!!! Quiero un biznieto de Brat Pitt y cómo se te ocurra meterte a Celestina entre él y la Jolie, te voy a dar tal bofetón que me río yo de lo que te ha hecho mi primer marido" (que agresiva es la abuela cuando se altera) Nena, dáme chinchón que me estoy poniendo nerviosa." 

No hay comentarios:

Publicar un comentario