jueves, 26 de octubre de 2023

Que no decaiga la fiesta.

La abuela, que tiene más moral que el Alcoyano, ha vuelto a la carga allanándome el camino para encontrar al futuro padre de su bisnieto. - "Ahora llega una nueva ocasión. A ver si pones los cinco sentidos y acabamos de una vez con éste culebrón, nena".

He mirado el calendario y no he visto nada del otro mundo. - ¡¿CÓMO QUE NO?! ¡Y TANTO QUE ES DEL OTRO MUNDO! (tronó la voz de mi primer abuelito) - ¡Ay, que susto me has dado! - Viene la festividad de Todos los Santos (dijo mientras emprendía un vuelo por el techo del comedor arrastrando una preciosa capa de seda negra llena de llamitas saltarinas.) - Bonito sudario, abuelito, aunque peligroso ¿no crees?... ¡Aaaaah, claaaaaaro! quieres provocar un incendio para que los bomberos de calendario vengan a apagarlo ¿eh, pillín?

El abuelito se sonrojó. - Es que empieza a gustarme la idea de tener un bisnieto... - ¡Virgen del Amor Hermoso, solo faltabas tú! 

Mientras, en el cuadro de la Santa Cena, empezaron las discusiones: - ¡Yo quiero un rosario de dulces! (dijo el de las 30 monedas) - Todo el mundo se apuntó al carro pero... - ¿Tenéis monedas?... ¿No? pues ajo y agua, queridos (dijo el potentado) - Entonces me escuché a mi misma: ¡Haré torrijas!

Al momento todas las bolas de polvo se arremolinaron a mis pies: - ¡Yupiiiii!

- Perdón, perdón. Ha sido un lapsus jejejejejejeje

Hasta el árbol de la calle me puso de vuelta y media: - Que qué cara más dura tienes - Con la comida no se juega. - ¡Así te coma Pepe el jibarizado! (gritó Pompilio en un arranque y nos estuvimos riendo dos días seguidos porque Pepe solo es un llavero): JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA...Y hemos celebrado la guasa con chinchón, claro.


 

 

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