sábado, 13 de mayo de 2023

Dichoso trapicheo.

 ¡Hace frío! Lo he comprobado cuando esta mañana he salido al balcón a saludar al árbol de la calle y decirle que no se vaya arriba cantando Estas son las mañanitas porque ya me las sé de memoria. Pero, apenas he sacado la nariz a fuera se me ha quedado fría y en lugar de entablar diálogo he dado un concierto de estornudos que no lo mejora el árbol por mucho que presuma.

Al entrar en casa he ido en busca de la olla grande para hacer un caldo de huesos y verduras, recuperados por la Cotilla del contenedor de basura del supermercado.

Entré en la cocina, miré en la estanteria superior a la de Pepe el jibarizado ¡y no estaba! Entonces no  me quedó más remedio que preguntar a la cabeza hueca. Y mira que me supo mal porque no puede oír hablar de ollas. Le trae recuerdos de cuando lo guisaron con patatas sus enemigos. - Por toda respuesta obtuve un NO furioso: ¡OOOOOOOOOOOOOOOOO!

Busqué la olla por los rincones más insospechado y pude darme cuenta de cuanto ha crecido la tribu de bolas de polvo. 

También vi a Pompilio. Se va a Inglaterra después de haber visto la Coronación de Chaaaaaarles III - Allí siempre tendré trabajo. Aluciné viendo la cantidad de calcetines que gastan en ese sitio ¡Es jauja!

Seguí en busca de la olla perdida hasta que: - ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaaa! - Cotilla ¿ha visto la olla grande? - Naturaca. Esta noche la he cambiado por una radio de los años cuarenta. - ¡Pero si es mía! - Era, boba de Coria. Era.


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