sábado, 22 de diciembre de 2018

A favor de la igualdad de sexos.

La abuela está liderando un Movimiento a favor de la Igualdad entre los sexos. Al principio muchas de sus amigas millonetis se escandalizaron pero cuando supieron que a la cabeza de la iniciativa, además de la abuela, estaba la Momia, se sumaron a él. Otras lo hicieron porque la palabra Movimiento, les traía recuerdos, buenos o malos, quién sabe. Aunque también las hubo que pensaron que lo de Movimiento venía por menear el esqueleto de fiesta en fiesta.

- "Tuve que explicarles que baile habría, pero que no se refería solo a esto" - ¿Sóis muchas? - "Pues sí. La Momia es un buen reclamo. Han dicho, si ella puede, nosotras que tenemos menos años, también. En la primera reunión que hicimos y después de mucho hablar todas a la vez porque muchas nunca habían sido asamblearias, conseguimos aprobar que lo primero que haríamos sería elegir una plaza de la Ciudad para bailar. La plaza de España"

- ¿Y qué tal fue? - "Es ésta tarde. Tienes que venir con Pascualita. Debe aprender que todos somos iguales y demostrarlo en todos los ámbitos de la vida." - No lo entenderá. - "Por eso quiero que lo vea."

- ¡Avemariapurísimaaaaaaaaaaaaaa! ¿Sabes lo de tu abuela, boba de Coria? Quiere que vaya con un acompañante... ¿Por qué no le preguntas a Pascual si quiere venir conmigo? - ¿Pasc...? ¡Ah, está de viaje al Polo Sur! - Me suena a excusa barata. - Es geólogo marino...- Nunca me lo habías dicho. - Nunca me lo preguntó, Cotilla... ¿Por qué no va con Bedulio? - Está de baja por los nervios. Solo puedo ir con Pascual. - Mandele un telegrama. - Me miró de arriba abajo y exclamó ¡Que antigua eres!

Cuando llegué, la plaza de España estaba llena de parejas que llevaban la ropa igual entre sí. Me costó mucho encontrar a los abuelitos. Ella llevaba un peñacho de plumas verde loro sujetas a un pequeño sombrerito con velo cubriéndole los ojos. Los pendientes eran unas criollas hasta los hombros. Un jersey de angora rojo pasión y una muy mini falda para enseñar sus preciosas piernas en casi toda su extensión. Medias granates y estilettos haciendo juego con las plumas de la cabeza, remataban su atuendo... y el de Andresito.

- ¡¡¡Abuelito, estás fenomenal!!! - ¿Tu crees, nena? (parecía compungido) Me ha dado la impresión de que Geoooorge se reía de mi. - De repente, su cara se iluminó - ¡Miralo! - Como si lo llevaran al matadero, venía acompañado de la Cotilla. Ella llevaba un traje de lunares blancos en fondo rojo. Una peineta de plástico de los chinos. Zapatos de plataforma blancos... y el inglés también.

Hasta Pascualita abrió los ojos como platos ante tamaña visión de las dos parejas. - Pronto empezó la música y poco a poco, las parejas (ellos un poco cohibidos al principio) salieron a bailar. Aunque debo decir que quién abrió el baile fue la Momia con sus cubanitos culito-respingones (éstos, más jóvenes que los anteriores a los que había despedido "por viejos")

Fue un éxito rotundo. Aunque, más allá de la media noche tuvieron que venir los antidisturbios porque el chinchón había corrido más de la cuenta entre la concurrencia y se montón un follón en plena plaza, entre los asistentes al baile y un grupo de niñatos dispuestos a reírse de los mayores. Menos mal que los guardias acabaron salvando a los chicos.

No hay comentarios:

Publicar un comentario