miércoles, 11 de noviembre de 2020

Donde dije Digo, digo Diego.

 ¡AAAAAAAAAAAAYYYYYYYYYYYYYY! No, no estoy cantando flamenco. Es que me ha crujido la espalda y si me siento no me levanto. Y si me levanto, no me siento...

Toda la culpa la tiene Pepe el jibarizado. Lleva desde ayer haciendo OOOOOOOOOOOOOOOO a todo volúmen. Ya no sé como tengo que callarlo. Hasta lo he tapado con la olla exprés y ahora su voz suena como el lamento de un ánima en pena. - ¡¡¡Calla ya o te arranco la pelambrera que tienes, jodío!!!

Mi primer abuelito llegó muy ufano a contarme las cosas que había conocido de la vida anterior a convertirse en llavero de Pepe pero yo, poniéndome un dedo sobre los labios, le hice callar. - ¿Qué pasa? (dijo, telepáticamente) - No se va a hablar más de éste asunto. Punto. - Peroooo... - NI pero, ni pera. Y pasé a contarle lo que pasaba. - ¿Y? - ¿No lo entiendes? - ¡Claro pero ¿y?! - ¿No oyes como grita? - Sí pero ¿y? - Ay, abuelito, no me saques más de quicio de lo que estoy.

Se subió sobre la olla exprés y se sentó a esperar. - Pascualita se asomó al borde del acuario tapándose las orejas. Después me miró y sacó la dentadura de tiburón a pasear. - ¡Que harta me tiene ésta cabeza! - Un rato después, el OOOOOOOO subio varios tonos y aquello ya fue inaguantable. Saqué a Pepe de la olla y lo encerré en el tambor de la lavadora, poniendo encima todas las mantas que encontré. Pero el grito se seguía oyendo ¡No había nada que hacer! Entonces me senté en la salita a ver el programa de la Esteban. Verla la vi pero no pude escucharla. Y, encima, cuando menos lo esperaba, subió varios tonos más. 

- ¡Ya está bien! Hasta aquí hemos llegado. Me levanté de un  salto de la butaca mientras una rabia compacta me atenazaba la garganta y... un ¡CRACK! en mi espalda hizo que a los vecinos de la escalera se les pusiera la piel de gallina. 

Al principio pensaron que crujía el edificio entero y temblaron pensando en el desalojo. Después salieron a la calle corriendo despavoridos. - Fue en ese momento cuando pronuncié la famosa frase: ¿Por qué no te callas? - El abuelito me informó.: Se ha enfadado tanto porque no quieres que se publique su historia. - ¿En serio? ¿Y su dignidad ofendida? - A la porra con eso ¡Quiere ser famoso! -  ¡DILE QUE LO CONTAREMOS TODOS PERO, QUE SE CALLEEEE...!

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