martes, 13 de octubre de 2020

Ai, Deu meu.

 Al mirar el calendario de la cocina he dado un respingo ¡Martes y Trece! Aaaaayyyyyyy, con lo que me gustaban. Recuerdo aquellas empanadillas de Móstoles y me parto de risa. La pena es que ya no están juntos. Primero se separó la Y y más tarde Trece se fue por aquí y Martes por allá... Todo lo bueno se acaba. 

Pero me sentí tan bien recordándolos que llamé a la abuela. - Geooooorge, que se ponga la abuela. - Madame no estar here. - ¡¡¡O le dices que se ponga o te arranco un ojo y lo luzco de broche!!!

En ésta ocasión fue el inglés quien dio un respingo. - "¿Le has dicho algún inconveniente a mi mayordomo?" - ¡¿YOOOOOOOOOOO?! jajajajajajajajaja ¡que cosas tienes, abuela! Te llamo porque acabo de enterarme que hoy hacen fiesta Martes y Trece. Fíjate si fueron famosos que hasta los pusieron en el calendario. Si es que quien vale, vale y el que no, pa cabo.

- "¡Cómo te va a durar una botella de chinchón si ya le das tientos de buena mañana!" - No lo he tocado... ¿Te acuerdas de las empan...? - "Que cruz tengo contigo. ¡Hoy es martes y estamos a día trece, pardala! - ... Aaah... ¿ese día que no hay que casarse ni embarcarse? - "El mismo" - Uf, menos mal que no tengo que hacer nada de eso. Solo ir a que me hagan una resonancia magnética... ¡Oh, no. No, no, no. ¡Ni hablar! 

A pesar de que la abuela trató, en vano, de convencerme de que todo esto son tonterías, no tuvo éxito. - Es que yo soy mucho de hacer caso a los refranes. "Pero no dice nada de la resonancia magnética" - ¡Y qué! ¡Me enramparé, me harán la permanente en seco ¡Que no voy! - "¿A qué te desheredo?"

Cuando a la abuela le da por hablar claro... convence.


 

  

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