viernes, 24 de septiembre de 2021

Despertar brusco.

El árbol de la calle me ha pedido auxilio, pero no en voz baja y humildemente como se esperaría de alguien que tiene un problema y le da vergüenza que la gente se entere... ¡Que va! Lo ha hecho a grito pelado el muy jodío porque yo estaba en el mejor de mis sueños, donde me tocaba la Primitiva. Y no me refiero a Pepa la Cromañona sino, a los números de la suerte que tan esquivos son conmigo cuando estoy despierta.

¡Madre mía, que lluvia de billetes de quinientos euros caían sobre mí! Era una gozada pero duró poco porque las palabras: Boba de Coria, fueron entrando a escoplo y martillo en mi cerebro y claro, así no hay cristiano que pueda celebrar nada.

Cuando abrí los ojos mi cuarto estaba oscuro como la barriga de la ballena que se tragó a Pinocho y no tenía a mano una pila o un cabo de vela. Me levanté y tanteando llegué al pasillo donde encendí la luz y pude ver el reloj: ¡Las dos y media!

De nuevo me llegó la llamada. Entonces la reconocí. Era el árbol de la calle... ¿a esas horas? ... ¿Lo estarían podando? pero ¿a esas horas? Recordé que ante un delito nocturno en los periódicos dicen: con nocturnidad y alevosía. Eso no sé que es y no me iba a poner a averiguarlo a esas horas brujas de la noche.

- OOOOOOOOOOOOOOOOOO - La voz de Pepe el jibarizado me obligó a salir rápidamente al balcón antes de que se despertaran más personajes.

- ¡Hija de mi vida, luego dirás que no duermes! Llevo media hora llamándote ¡RIEGAMEEE! - ¿Perdón? - ¡ESTOY SECOOOOOO! Tanto anunciar en la tele que lloverán chuzos de punta ¡Y NO HA CAIDO NADAAAAAA! - ¡Calla, loco! - ¡TENGO SEEEEEEED!

Le eché cuatro o cinco cubos de agua desde el balcón al alcorque y pronto se encendieron luces en las casas vecinas: - ¿Qué ocurre, Paco? - La rara del primero está tirando agua a la calle. - ¿A éstas horas? - Si no, no sería rara. - ¡Mateo, llama a los municipales o mejor al manicomio y que se la lleven una temporadita! - Lo he hecho. Está de guardia Bedulio y dice que a esa casa no va y menos a éstas horas, aunque se lo mande el ministro... Yo tampoco iría... - La mujer, airada, remató con un: ¡Hombres! ¿el sexo fuerte? jajajajajajaja

No hay comentarios:

Publicar un comentario